El sistema de vuelo automático proporciona una previsión de tiempos de vuelo, distancia, velocidad, consumo de combustible y altitud optima, reduciendo la carga de trabajo de los pilotos en la cabina. De igual forma, mejora la eficiencia de la tripulación y elimina muchas tareas que se realizaban de forma rutinaria.

Como se prepara la ruta?

Durante la preparación de cabina antes de cada vuelo, el piloto introduce manualmente la ruta deseada de origen a destino en el sistema de gestión de vuelo de la aeronave. La ruta incluye entre otros aspectos, la salida (SID), puntos en ruta, llegada (STAR) y ruta al aeropuerto alternativo. Toda esta información esta contenida en la base de datos de navegación de cada avión y es actualizada de forma periódica. El sistema genera la ruta y lo muestra al piloto en el instrumento de navegación (ND).

Fiabilidad del sistema de vuelo automático

El Piloto Automático esta integrado en un conjunto de sistemas autónomos capaces de calcular con fiabilidad y precisión todos los parametros de la aeronave. De forma automática, el conjunto de sistemas puede definir la posición exacta del avión, controlar el empuje y la velocidad, mantener la altitud de crucero, consumo de combustible entre otros aspectos. Como característica principal, el piloto automático es capaz de llevar el avión durante casi todo el vuelo sin necesidad de actuación del piloto.

Volando con el piloto automático

Debido a la fiabilidad del sistema, este recurso proporciona una gran comodidad a los pilotos a la hora de volar. Permite al piloto realizar otras funciones importantes mientras el piloto automático se encarga de mantener la aeronave segura y bajo control. La opción de activación/desactivación del piloto automático o modificación de cualquier parametro inicial se puede realizar en cualquier momento del vuelo.

En definitiva, el sistema de gestión de vuelo automático ha revolucionado la aviación, permitiendo una mayor seguridad en las operaciones, reduciendo el riesgo de errores humanos, que en líneas generales es el 70% de las causas de accidentes aéreos. Por otra parte, reduce el estrés y la fatiga de los pilotos, que en antaño realizaban de forma manual todas las funciones asignadas al piloto automático.